Sal de la zona de confort

Las personas prefieren vivir en un pequeño espacio haciendo cosas que saben que pueden hacer. Son hábitos, rutinas, las cosas a las que estamos acostumbrados que repetimos siempre. Y nos resistimos al cambio, a que nos saquen de ahí. ¿No quieres saber hasta dónde podrías llegar?.

Puede que se esté cómo pero, ¿se es feliz siempre en ese sitio?, ¿me aseguras que no te arrepentirás de no haberlo abandonado nunca?.

Antes de las nuevas experiencias, los aprendizajes y los éxitos hay un círculo que rodea a la zona de confort donde se encuentran todos los miedos y como está alrededor, es difícil superarlo y seguir a la siguiente zona, la de acción y aprendizaje. 

Cuando se sale a la zona de miedo y somos incapaces de superarla, nos boicoteamos a nosotros mismos con las mentiras que nos mantienen en la zona de confort. 

 

Excusas que nos ponemos para no salir de nuestra zona de confort porque ahí se está muy bien

 
No sé cómo hacerlo: es algo nuevo, vale, puede que no sepas cómo hacerlo pero eso solo es una excusa para seguir en nuestra zona más tranquila y no tener que enfrentarnos a nada. Si no se intenta no se sabe y si no te pones a ello nunca sabrás si puedes desarrollar esas habilidades y esos conocimientos para llegar donde quieres.

No es el momento adecuado: ¿y cuándo lo será?. Conozco a alguien que siempre esperaba que se diesen las condiciones perfectas para presentarse al práctico del carné de conducir y al final, pasaron dos años y le caducó el teórico.

Comenzaré cuando...: siguiendo con el ejemplo de antes, el discurso que tenía era más o menos éste: "es que ahora es Navidad, me espero a que pasen las fiestas y comenzaré cuando se pase el jaleo navideño. Hace mucho frío, comenzaré cuando haga menos calor a dar las clases porque no quiero estar con el abrigo en el coche. Ahora es Semana Santa y me voy a ir al pueblo, comenzaré cuando pase, ya son vacaciones de verano, como me cojo quince días en julio y quince en agosto, comenzaré cuando se pase el calor y llegue septiembre... al final no se presentó y gastó mucho dinero por no enfrentarse a la situación tan estresante del examen porque se presentó una vez y suspendió. No dejes que te domine el miedo, cualquier momento es bueno para empezar.

No tengo por qué hacerlo: claro, no tienes porqué pero si sigues en la zona tranquila y cómoda no crecerás. Si nunca te enfrentas a desafíos, siempre haces cosas que sabes y dominas y los miedos te paralizan para cambiar, nunca mejorarás. El simple hecho de aprender, aunque sea a qué no hacer, es muy importante. Hay que vencer la resistencia al cambio o siempre estarás limitado.

No es para mí: si tu autoestima es baja o eres inseguro y te dejas dominar por el miedo, es la excusa que vas a poner. Es como prejuzgar una película o un libro, si no lo lees o no la ves, no sabrás si es para ti o no. Así que no dejes de probar, las nuevas experiencias son muy enriquecedoras y deberías probarlo todo antes de poder afirmar que algo no es para ti.
 

¡Atrevete, consigue tus sueños!